Este fin de semana también me ha tocado comer fuera de casa, pero esta vez a sido por una boda. La celebración de la boda a tenido lugar en el restaurante Tubal de Tafalla donde nos hemos reunido para cenar. Mientras hemos esperado la llegada de los novios, nos han servido varios aperitivos, de los cuales sólo me he atrevido a comer uno de foie, los otros aperitivos estaban fritos en una masa crujiente y al comentarle al camarero mis problemas con el huevo, no me ha solucionado mi duda, y he declinado por esperar un poco y cenar más tranquilo.
Tras un primer plato lleno de dudas, cuando hay un alérgico los restaurante suelen servir a todos menos al alérgico dejándolo para el final, muchas veces el plato tiene que ser especial o simplemente cambiado por otro plato distinto. Muchas veces comento que no puedo comer huevo y el camarero/a lo tiene en consideración, esta me toco una camarera que ya estaba avisado de mi alergia al huevo, pero al no comentarme nada no sabia sí lo podía comer o no, tras retirarme el plato, me lo volvieron a traer y me aclararon que todos los platos que me sacarían más tarde los iba a poder comer tranquilo.
Tras ese momento de intranquilidad tengo que decir que comí muy bien, un plato fue especial, comí lo mismo pero el mio no lo hicieron con huevo ya que sólo era para decorar. El mil hojas de chipirones me lo cambiaron por uno de foie con patatas.
El postre ahí siempre tengo problemas, casi todos tienen huevo o derivados de huevo, bueno mi postre también fue especial no comí el bizcocho con helado, pero comí una espuma de chocolate con helado a mi novia le gusto más su postre, pero a mi me pareció rico y el postre es algo que me encanta.
Es raro que pueda comer todo lo que hay en un menú de boda, pero comentandole al dueño o al camarero que nos toca, siempre puedo comer bien y tranquilo y esta vez he cenado muy bien.
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